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JARANDILLA DE LA VERA

SU HISTORIA

Jarandilla estuvo habitado por pueblos vetones, que tenían en el toro y en el verraco sus símbolos sagrados. Un pueblo belicoso que no dudó en unirse al propio Viriato en su lucha contra Roma y que le valió que los propios romanos acabasen poniendo sitio a su "oppidum" en el cerro del Castillejo y, finalmente, fundando su propia ciudad: "municipium flavium Vivertorum": origen del Jarandilla actual que se mantuvo hasta época visigoda.

El nombre de Jarandilla deriva del árabe "Xarandilla" en referencia a la abundancia de Jaras, un arbusto de ramas oleaginosas y peludas de cuya característico pelo o vello ("xara" en árabe) proviene su nombre.

Alfonso VI conquistó Jarandilla a los árabes y en el siglo XII sus tierras fueron cedidas a la Orden del Temple, que construyó aqui una de sus fortalezas mejor conservadas (actualmente es la iglesia parroquial). Con la desmantelación de la orden por decreto papal, Jarandilla vivió una época de abandono, hasta que de nuevo, las tierras fueron otorgadas al Conde de Oropesa en el siglo XIV.

Alvarez de Toledo, Conde de Oropesa, levantó un castillo en el siglo XV como sede de su marquesado de Jarandilla. Fue mentor de importantes conquistadores de América nacidos en la villa, como Gaspar de Loaysa, descubridor del Potosí cuya lápida está en la iglesia parroquial.

En este castillo se alojó Carlos I de España y V de Alemania mientras acababan de acomodarle las estancias del cercano Monasterio de Yuste.

LOS ESCOBAZOS

 Cada noche del 6 de Diciembre, celebrando la Virgen de la Concepción, en Jarandilla tiene lugar una procesión de antorchas que se conserva de época medieval bajo el nombre de "Los escobazos", reminiscencia del fervor que llevaba a los pastores para bajar por la noche desde la sierra de Gredos para honrar a la Virgen. Sigue sacándose el estandarte sobre una caballería en una de las fiestas declaradas " de interés turístico".

FIESTAS DE SOPETRÁN

En Mayo tiene lugar las fiesta patronales de la Virgen de Sopetrán, que se remontan a épocas medievales.

Junto con las "fiestas del Cristo" en Septiembre, son las fiestas más tradicionales de Jarandilla, con numerosos eventos.

Destaca también en verano la exposición de oficios antiguos y el festival de músicas tradicionales.

EL CEREZO EN FLOR

 

Existe una variedad de cerezo que se llama "la jarandillana", pues no en vano la Vera es un gran productor de cereza, y de frambuesa, como puede comprobarse en varias de las cooperativas de la zona (en especial la de Garganta de la Olla, donde se sorprenderán de la excelente calidad de estos productos.

Visitar La Vera es disfrutar de una comarca de 14 pueblos en la que tres de ellos - Graganta, Valverde y Villanueva- están declarados "monumento nacional". Monasterios como el de Yuste o parajes como el de "El piornal" ( el pueblo más alto de Extremadura desde el que se divisa todo El Valle del Jerte) son altísimamente recomendables. En primavera, visitar los cerezos en flor es un espectáculo cuya fama ha sobrepasado los límites de España.

LAS GARGANTAS Y LOS CHARCOS

La naturaleza espectacular de la ladera sur de Gredos permite muchísimas rutas para los senderistas, pero también el disfrute de las no menos espectaculares gargantas y en verano, de sus "charcos" o piscinas naturales como este de Parral, en Jarandilla de la Vera a la que se puede llegar andando desde "Las Hazas" en pocos minutos.

Jarandilla es el único pueblo de la Vera que tiene dos gargantas: la "Jaranda" ( en la imagen) y la "Jarandilleja" ( también conocida como "la del Cristo").

EL OCIO

Jarandilla de la Vera tiene - sobre todo en verano- una de las más animadas vidas nocturnas de toda la provincia de Cáceres. Dispone de mas de media docena de recomendables restaurantes (El Norte o K´Leti si le gusta la cocina moderna o Robles, Tarra o "Puta Parió" si le gusta la comida tradicional, por ejemplo)

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